Huelva, calor y brisa marinera.

Huelva deslumbra, de forma tímida a todo el que pausa un instante su vida para observarla. Los paisajes naturales que comparte con la provincia de Cádiz, pertenecientes al parque de Doñana son maravillosos.

Las dos fotografías de la publicación de hoy, han sido tomadas en las inmediaciones de dicho parque, al atardecer de un día caluroso y largo de verano ¡Quién pudiera volver! 

Parque Doñana


En el viaje que me llevó a este lugar mágico, recuerdo pasar muchas horas al sol en las playas onubenses de arena finísima, para posteriormente, descansar leyendo un buen libro en la furgoneta que sería nuestra casa durante esa quincena. Por un momento, pude unir mis dos hobbies, la fotografía al atardecer (confieso que esas luces son mis favoritas) y viajar en furgoneta. Viajar de esta forma, significa ser nómada en tiempos reales, pudiendo escoger qué imagen se graba en mis ojos cada día antes de ir a dormir, siendo afortunada al decidir el paisaje que me va a acompañar cuando me tome el café del desayuno. 

La furgoneta donde viajamos.

Cuando por fin encontramos el sitio idóneo para descansar, la tranquilidad se podía sentir, el silencio era absoluto y nuestros cuerpos cansados de un día agotador pudieron descansar gracias a aquella brisa marinera que daba un respiro al termómetro.


Un carrete de recuerdos.

Eva Gómez Rodríguez.

Comentarios

  1. El parque de Doñana es una maravilla y bien se ve en esta fotografía, con la luz de la luna iluminando el hermoso parque.

    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si, es precioso.
      Espero que te guste mi texto junto con las fotos.
      Un saludo.

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Autorretrato

Viento de cara

Una nueva aventura